Las palabras nunca alcanzan cuando lo que hay que decir desborda el alma.

sábado, 17 de enero de 2015

Qué bronca.

Que bronca (no hay otra palabra para describir tal...tal..BRONCA) que me provoca darme cuenta que las personas que tengo a mi alrededor la mayoría de los días y hasta pueden llegar a ser de los años porque no,no me conocen ni la mitad de lo que deberían conocerme.Sí ,porque no puede ser que si compartís tanto tiempo conmigo no veas ni un cuarto de mi esencia. Es más, se dan el lujo de fingir metódicamente que sí ,indudablemente, me conocen. Por el amor de Dios, de la virgen María, Magdalena, Barrabás y no sé que otro personaje más invocar por el momento. 
¿Saben qué? Sólo saben las millones de cosas que puedo mostrar día a día,las más simples. Que hasta una persona que me ve por primera vez,ese mismo día puede descifrar. Y eso,al menos para mí, no es conocer. Eso es la obviedad (?) ,la lógica, y toda esa mierda unida a la razón. Mis complejos sólo dos personas sabrán cuales son. Y no se esfuerzan por conocerlas e ir hasta el fondo de cada una de ellas,estudiarlas,aprenderlas de memoria, repetir como un loro,y después de tanta monotonía comprenden un monólogo que comienza con un "conozco a Victoria Belén Simari porque...".Eso apesta, huele a bazofia y deberían darse cuenta.
Aquellas que al verme no vieron un cuerpo,sino un alma.Les agradezco desde ahí mismo, por saber ver con los ojos del corazón y no con los ojos de la estúpida razón. 


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